El sistema judicial puede resultar abrumador para las víctimas y testigos que deben revivir hechos traumáticos. En San Francisco, Estados Unidos, encontraron una respuesta tan tierna como efectiva: perros entrenados para brindar apoyo emocional.
La fiscal María Bottini tomó contacto con el equipo de la Oficina del Fiscal de Distrito de San Francisco (DA’s Office), donde funciona un programa pionero que utiliza estos “perros de instalación” para acompañar a víctimas y testigos durante todo el proceso judicial. El Ministerio Público Fiscal (MPF) de Chubut evalúa replicar esta experiencia en la provincia.
Estos animales no son simples mascotas. Su entrenamiento les permite mantener la calma en entornos de alta presión y ofrecer contención emocional a quienes enfrentan el difícil paso de declarar o participar en audiencias. En muchos casos, los canes acompañan a niños o adultos durante entrevistas con investigadores, generando un entorno seguro y favoreciendo la comunicación. Incluso, en algunos tribunales estadounidenses, se les permite ingresar a la sala de audiencias mientras la víctima presta testimonio.
Diversos estudios respaldan la eficacia del método: el contacto con estos perros ayuda a reducir la presión arterial y la frecuencia cardíaca, disminuyendo notablemente el nivel de ansiedad.
En Chubut, el MPF busca adaptar esta iniciativa para brindar un acompañamiento más humano y empático a las víctimas del delito. La propuesta se encuentra en etapa de análisis y apunta a incorporar un recurso que, más allá de lo simbólico, puede marcar una diferencia real en la experiencia judicial.
























