El ntendente Pablo Carrizo firmó un decreto que declara el estado de emergencia hídrica en Caleta Olivia, luego de que se registrara una importante disminución en el caudal de agua proveniente de Comodoro Rivadavia. La medida, oficializada en las últimas horas del martes, busca hacer frente a una crisis que ya afecta a gran parte de la población y a distintos sectores productivos.
Según detalla el decreto, la ciudad atraviesa una “situación hidrológica extrema” que compromete el abastecimiento de agua potable en hogares, escuelas, hospitales y otras instituciones esenciales. En varios barrios ya se reportan dificultades en la distribución, lo que llevó al Ejecutivo municipal a adoptar medidas urgentes.
Entre las acciones dispuestas se incluye la contratación de camiones cisterna para garantizar la provisión de agua a los servicios básicos, además de reforzar la coordinación con la empresa provincial Servicios Públicos Sociedad del Estado y con el gobierno santacruceño. El objetivo es preservar el caudal que llega desde el acueducto Lago Musters y mantener en funcionamiento las perforaciones de Cañadón Quinta, fuentes clave del suministro local.
Desde la Municipalidad remarcaron la necesidad de un uso responsable del agua potable y adelantaron que se lanzarán campañas de concientización para evitar el derroche en viviendas y espacios públicos.
El estado de emergencia se mantendrá vigente mientras persista la crisis, en tanto las autoridades avanzan en gestiones conjuntas para garantizar la provisión mínima del recurso en toda la ciudad.
























