La imputada por el crimen de su pareja, cometido en Tecka el sábado por la noche, fue llevada a audiencia de control de la detención y apertura de la investigación por la Fiscalía. El fiscal Martin Roberson y la funcionaria Gabriela Balbuena, calificaron provisoriamente los hechos como constitutivos de homicidio agravado por el vínculo y por alevosía y pidieron la prisión preventiva por seis meses por peligro de fuga. A partir de un planteo de la Defensa Pùblica, la juez dispuso la prisión preventiva en modalidad domiciliaria a cumplir en el domicilio de la madre de la imputada, en Paso de Indios.
El sábado, aproximadamente a las 20hs, Luciano Jonatan Miranda estaba con su pareja en la casa en que convivían en Tecka. Ambos compartían bebidas con dos hombres, sentados en torno a la mesa del comedor. De acuerdo a la información con la que cuenta al momento la Fiscalía, Luciano le sacó el celular de la mano a su pareja y esta, enojada, se levantó de la silla, fue hacia la víctima, lo abrazó desde atrás con una mano y con la otra le asestó dos puñaladas por la espalda, produciéndole dos heridas penetrantes de 3 y 5 cm, a raíz de las cuales se desencadenó su fallecimiento a las 1:30 hs de la madrugada en el Hospital de Esquel, donde había sido derivado desde el Hospital de Tecka.
Para fundar la legalidad de la detención, Balbuena expuso la secuencia desencadenada a partir de la agresión. La joven, junto a su hija, se dirigió al hospital, antes de ingresar escondió el cuchillo en una alcantarilla, entró y avisó que su marido estaba apuñalado. Le preguntaron si avisó a la policía, dijo que no y volvió a la casa. Llegó cuando estaban llegando los uniformados al lugar. Los dos hombres que bebían con la pareja, estaban en la puerta y la señalaron como la autora, ella lo reconoció añadiendo que se haría cargo. Posteriormente le dijo a la policía donde encontrar el cuchillo que uso en el hecho.
El defensor Marcos Ponce pidió que se aborde el caso con perspectiva de género. Argumentó en torno a la situación de su defendida, la responsabilidad sombre su hija, la falta de lugares de detención próximos al ámbito de residencia de su familia y la conducta demostrada por la imputada, colaborando con la investigación y poniéndose a disposición de la policía. Pidió que se morigere la medida con un arresto domiciliario a cumplir en la casa de la madre de la joven, en la localidad de Paso de Indios, lo que llevaría a que se mantenga distante de los testigos.
Luego de un cuarto intermedio la juez de turno, Silvana Vélez, resolvió declarar legal la detención, formalizar la investigación y disponer la prisión preventiva en modalidad de arresto domiciliario por el plazo de seis meses.