Alrededor de 5,9 millones de usuarios que no se inscribieron al Registro de Acceso a los Subsidios a la Energía pasarán a pagar la tarifa plena en un proceso de reducción bimestral. El impacto en la facturación comenzará reflejarse en octubre.
El nuevo esquema de segmentación para los servicios de gas y electricidad comienza formalmente a implementarse este jueves con nueve millones de usuarios de ingresos medios e inferiores que se inscribieron en el registro habilitado desde el 15 de julio, en tanto que se analiza la eventual incorporación al beneficio para determinadas entidades educativas, religiosas, deportivas y sociales.
De esta manera, alrededor de 5,9 millones de usuarios que no se inscribieron al Registro de Acceso a los Subsidios a la Energía (RASE) -por una diversidad de circunstancias o porque lo hicieron pero sus ingresos corresponden a un nivel superior- pasarán a pagar tarifa plena en un proceso de reducción bimestral.
Fuentes de la Secretaría de Energía de la Nación señalaron a Télam que la implementación en cada una de las distribuidoras de gas y electricidad se podrá reflejar en los próximos diez días, a medida que los respectivos entes reguladores provinciales comuniquen los nuevos cuadros tarifarios a aplicar y el listado de beneficiarios.
En la Secretaría que conduce Flavia Royon se estima que el impacto en la facturación comenzará a verse reflejado a mediados de octubre, y para entonces con un menor consumo de los hogares por un clima más templado y una reducción estacional del precio de la energía, el impacto inicial se podría ver morigerado.
En los casos de beneficiarios de niveles 2 y 3 de subsidios, no tendrán incrementos formales aunque deberán pagar una tarifa plena si el consumo supera el tope de 400 kwh mensual.