Este jueves 11 de diciembre se cumplen dos meses desde que Juana Inés Morales y Alberto Pedro Kreder desaparecieron en Comodoro Rivadavia, un caso que mantiene en vilo a la ciudad y que, pese a los amplios operativos realizados, no logró avances determinantes. En este contexto, el Ministerio de Seguridad de la Nación lanzó una recompensa de $5 millones por cada uno para cualquier persona que aporte información clave.
La pareja de jubilados fue vista por última vez el 11 de octubre, cuando salió desde la casa de Kreder, en el barrio Ciudadela, rumbo a Camarones a bordo de una Toyota Hilux color champagne. El viaje se cortó abruptamente pocas horas después: ambos teléfonos tuvieron su última conexión a las 09:53, momento desde el que se perdió todo rastro.
Durante estas ocho semanas se realizaron búsquedas masivas, pero solo apareció la camioneta del hombre, abandonada días después en el sector conocido como Zanjón de Visser. La reconstrucción de los investigadores mantiene abiertas tres líneas: una desaparición voluntaria, un accidente o —la hipótesis con más sustento para la Fiscalía— que hayan sido víctimas de un hecho delictivo.
Sin nuevas pistas, Nación decidió intervenir con el ofrecimiento de una recompensa dirigida exclusivamente a personas ajenas al caso que puedan aportar datos verificables. La esperanza de la Policía Federal y de la Justicia es que un testimonio silencioso permita reorientar la búsqueda.
Mientras el tiempo avanza, el interrogante sigue igual de firme que el primer día: ¿dónde están Juana y Alberto?























