El hecho se produjo en la serie C, de la liga italiana de fútbol, donde el jugador del Triestina, Raimonds Krollis, fue expulsado a los 33 minutos del primer tiempo, cuando enfrentaba a Giana Erminio.
Krollis se retira con la cabeza abajo con destino al vestuario tras ser expulsado y es cruzado por su propio entrenador, quien lo toma de la camiseta con bronca y lo zamarrea ante la vista de la platea y las cámaras.
El entrenador Pep Clotet en conferencia, no solo defendio su ataque de ira, sino anunció que mientras el continúe al frente del equipo, Raimond Krollis, no será tenido en cuenta.