Un hecho insólito y repudiable de maltrato animal generó indignación en la Ciudad de Buenos Aires. Un joven fue filmado mientras robaba dos gansos de los Lagos de Palermo para luego llevarlos a su casa y sumergirlos en la pileta de su jardín.
Las imágenes muestran cómo el joven atrae a las aves con migas de pan en la orilla del lago, para luego tomarlas bruscamente del cuello y cargarlas en un auto estacionado sobre la avenida Sarmiento. Más tarde, ya en su domicilio, los animales aparecen nadando en una piscina con agua tratada con cloro, una sustancia dañina para su salud.
Especialistas advierten que el contacto con el cloro puede provocar irritación en las patas y la piel de los gansos, además de ocasionar problemas digestivos en caso de ingerir el agua. El episodio constituye no solo un robo, sino también un caso evidente de maltrato animal, al haber sido arrancados de su hábitat y expuestos a un entorno hostil que compromete su bienestar.
Lo más alarmante es que el hecho fue planificado: toda la secuencia fue registrada por un acompañante, lo que confirma la intención de filmar la “hazaña” para luego difundirla en redes sociales como si se tratara de un acto gracioso.
