Juan Matías Guerrero Aguilar, un joven egresado de la Universidad Nacional de La Matanza (UNLaM), ha llamado la atención en las redes sociales al publicar una foto en la que aparece cubierto de engrudo y témpera azul, una típica postal de egresados. Sin embargo, para Juan, recibir su diploma de Técnico en Desarrollo de Aplicaciones Móviles tiene un significado especial.
Juan nació con hipoacusia profunda bilateral, lo que significa que tiene una pérdida total de audición en ambos oídos. A pesar de esta dificultad, ha demostrado una gran perseverancia y ha querido compartir su historia para inspirar a otras personas que enfrentan desafíos similares. En su perfil de Linkedin, Juan compartió su experiencia y destacó la importancia de la perseverancia para alcanzar los objetivos que uno se propone.
Pero Juan no se limitó a compartir su historia en las redes sociales. Junto con un grupo de compañeros de carrera, diseñó una aplicación llamada Comuseñas, que utiliza el juego para enseñar el lenguaje de señas. Esta aplicación es especialmente importante para aquellos que tienen dificultades de audición, como Juan, ya que les proporciona una herramienta para comunicarse.
Juan, quien tiene 29 años y vive en el barrio porteño de Floresta, ha superado muchos obstáculos a lo largo de su vida. Durante su escolaridad, tuvo que esforzarse para aprender a comunicarse. En la primaria, sus docentes tomaban dictados diarios y corregían sus errores ortográficos, lo que le ayudó a mejorar su escritura con el tiempo. En la secundaria, tuvo que memorizar las posibles faltas de ortografía para evitar cometer errores. A pesar de su dificultad para comprender ciertas palabras, Juan siempre buscó ampliar su vocabulario y mejorar su comunicación.
Inicialmente, Juan comenzó a estudiar actuación para ampliar su vocabulario y comprender mejor el significado de las palabras que decían sus personajes. Sin embargo, debido a su problema de audición, tuvo que abandonar la carrera. Fue entonces cuando decidió estudiar Desarrollo de Aplicaciones Móviles, una carrera que le permitía utilizar sus habilidades para crear aplicaciones accesibles.
Durante la pandemia, Juan notó la falta de accesibilidad en las aplicaciones existentes, especialmente para las personas que utilizan el lenguaje de señas. Esto lo llevó a desarrollar su proyecto final de carrera, que consistió en crear una aplicación para enseñar lengua de señas y mejorar la comunicación en entornos académicos y laborales. Con el apoyo de sus compañeros de estudios y de profesionales en lengua de señas, Juan creó la aplicación Comuseñas.
La aplicación utiliza inteligencia artificial para proporcionar retroalimentación a los usuarios. Los usuarios deben identificar la señal correspondiente y luego repetirla frente a la cámara de su dispositivo. La aplicación les brinda correcciones y les permite avanzar en los niveles del juego. La aplicación ha recibido reacciones positivas y ha demostrado su impacto en personas de diferentes ámbitos que desean aprender el lenguaje de señas.
Actualmente, el equipo de desarrollo está trabajando en pulir los detalles de la aplicación para poder lanzarla en Playstore lo antes posible. Mientras tanto, aquellos interesados en conocer más sobre Comuseñas o ver una demostración pueden visitar la página web dedicada al proyecto.
