La única opción financiera que les garantiza a los ahorristas no perder contra la inflación podría cerrarse en los próximos días, en caso que prospere un pedido de los bancos para que limite las colocaciones en plazo fijo UVA.
El reclamo de las instituciones del sistema al Banco Central se instaló luego de la baja de la tasa de política monetaria, que derivó además en una caída de la tasa de plazo fijo a un promedio de 9% mensual.
Dado que esa tasa es desfavorable contra la inflación, los ahorristas comenzaron a tomar la opción de los plazo fijo UVA, que garantizan como retorno la inflación más un pequeño interés.
El cambio de cartera de los ahorristas es casi obligado dada la situación inflacionaria y en consecuencia los depósitos UVA pasaron de $265 mil millones antes de la asunción de Javier Milei a $658 mil millones a datos del 8 de enero. O sea, un alza de 150%.
Las colocaciones a plazo fijo UVA tenían un plazo mínimo de 90 días –con opción precancelable a tasa menor- y a fin de año el BCRA quiso convencer a los bancos extendiendo el período mínimo de depósito a 180 días. Pero esto resulta insuficiente para los bancos que quieren que se baje el límite de $5 millones como monto mínimo de colocación.
Desde el sector financiero aseguran que no cuentan con instrumentos para poder «calzar» la operatoria, o sea colocar el dinero de los depositantes en opciones que les aseguren poder pagar la inflación más un interés al vencimiento.
En caso que el BCRA ceda ante la presión de los bancos los ahorristas menos sofisticados se quedarán sin ninguna opción a la mano para cubrirse del alza de precios.
El total de plazo fijo UVA representa aproximadamente el 5% del total de los depósitos del sistema.
