El Banco Nación resolvió cerrar 9 sucursales ubicadas en la provincia de La Pampa, lo que se suma a la medida tomada días atrás de cerrar la Gerencia Zonal de esa provincia. Ambas medidas, según explicó la entidad en un comunicado, “se fundamentan en la decisión del gobierno pampeano de elevar al 15,5% la alícuota del Impuesto a los Ingresos Brutos que grava los créditos a las familias y a las pymes”.
Por ese motivo, se dispuso “el cese de actividades en las sucursales de Bernasconi, Colonia Barón, Eduardo Castex, General Acha, Guatrache, Ingeniero Luiggi, Intendente Alvear, Winifreda y Victorica”.
Al mismo tiempo, se facultó a la subgerencia General de Gestión de las Personas y a la subgerencia General de red de Sucursales “para que dispongan el destino de los agentes afectados y los puestos de revista”. Entre las sucursales que serán cerradas reúnen un total de 80 empleados. El resto de las sucursales que el Nación tiene en territorio pampeano pasarán a depender de la Gerencia Zonal de San Luis.
Otros bancos privados analizan seguir el mismo camino y cerrar total o parcialmente sus sucursales en La Pampa, según pudo saber Infobae de fuentes del sector financiero, donde reina el malestar con el gobierno pampeano por la sobrecarga impositiva. El punto crítico es cómo evitar que los clientes queden desatendidos. “Se está evaluando la radicación de las cuentas de las sucursales pampeanas en filiales de otras provincias y sostener la atención por vía digital en la medida de lo posible”, señalaron las fuentes.
De ese modo, en muchas localidades la única entidad financiera que sostendría su actividad sería el Banco de La Pampa, perteneciente al estado provincial. “Para los bancos, lo de La Pampa puede transformarse en un caso testigo: depende de cómo se resuelva el conflicto, otras provincias van decidir si suben o no sus impuestos provinciales. En cierto modo hay que aleccionar a los gobernadores”, explicó un alto ejecutivo de una entidad financiera.
Fuente: Infobae