A través de la firma de un acuerdo con el Banco Patagónico de Alimentos, se busca avanzar en la recuperación de alimentos para destinarlos a aquellos sectores de la comunidad que más lo necesitan.
Este lunes, el intendente Othar Macharashvili suscribió un convenio de colaboración mutua con el Banco Patagónico de Alimentos. Esta acción tiene como objetivo principal desarrollar un banco de alimentos en Comodoro Rivadavia para asistir a las familias que no cuentan con los recursos para adquirirlos.
Sobre el tema, la secretaria de la Mujer, Renata Hiller, afirmó que “este convenio nos brindará la posibilidad de generar un banco de alimentos en nuestra ciudad. Es sumamente importante para la región acceder al recupero de alimentos de las cadenas de supermercados”.
En ese sentido, expuso que “en Argentina se pierde un 40% de los alimentos que se producen porque no son correctamente aprovechados, entonces las redes de bancos de alimentos buscan potenciar el funcionamiento de todo el sistema, teniendo en la mira una finalidad comunitaria y social para que los alimentos lleguen a quienes más lo necesitan”.
“Desde la Municipalidad debemos organizar la forma de distribución de esos alimentos para contribuir a reducir al mínimo posible el descarte de productos alimenticios”, apuntó la funcionaria, al tiempo que agregó: “La idea es también aprovechar la producción local e integrarla en este circuito de alimentos”.
“Nuestra idea es que Comodoro sea una filial presencial”
Por su parte, la titular del Banco Patagónico de Alimentos, Paola Guerrero, manifestó que se trata de un convenio de colaboración recíproca y destacó que “estamos felices por refrendar este acuerdo con la nueva gestión municipal, comprometidos con el trabajo social y el emprendedurismo, con amplio espectro en Comodoro. Llevamos más de 37 años en la Patagonia y formamos parte de la Fundación de Estudios Patagónicos, que es una organización civil que tiene base en la ciudad de Neuquén”.
En ese contexto, señaló que “nos acercamos a las ciudades importantes de la región para desarrollar nuestra tarea y, además, llevamos adelante el programa Nutriendo Futuro, que desde hace tres años se enfoca más que nada en mujeres desocupadas en situaciones de vulnerabilidad social. Les brindamos apoyo con alimentos y programas que fortalecen su autonomía, no solo económica, sino de apropiación de derechos o formaciones socio-laborales, para mejorar su situación”.
Del mismo modo, afirmó que “si bien continuamos con Nutriendo Futuro, también estamos trabajando en la expansión de nuestro Banco Patagónico de Alimentos con filiales concretas. Trabajamos en diferentes ciudades, pero la idea es que Comodoro, sea una filial presencial para aumentar el rescate y recupero de los alimentos, no solo de las cadenas de supermercados, sino también trabajando con productores locales”.
“En el Banco de Alimentos trabajamos con alimentos no perecederos y en la seguridad alimentaria y nutricional, por lo que nos interesan mucho los alimentos frescos. En el Alto Valle de Neuquén tenemos acceso a frutas y hortalizas. Es grande el abanico que se abrió, con mucho compromiso y los equipos están abiertos a trabajar en conjunto”, explicó.
Finalmente, Guerrero expresó que “somos la caja de resonancia donde la gente viene a pedir ayuda. A modo de ejemplo, en Neuquén tenemos 20 comedores en lista de espera, por lo que trabajamos en alianzas para cumplir con una responsabilidad en esta sociedad para ayudar y dar una mano al que más lo necesita”.
