“Apoyó el hueco de su c… en la punta de la mía y empezó a moverse”; “…contó que sexo oral significa que el hombre le ponga el pito en la boca a la mujer y que ella chupe…”; “Se desnuda y se sube arriba mío. Me toca. Me penetra con el pene. A mi me duele”; “Sacó su p… por encima del bóxer y me la acercó a la boca…”. Estas son algunas de las frases incluidas en cuatro de los títulos que el gobierno de la provincia de Buenos Aires distribuye a las escuelas, y que han generado polémica y sobre todo mucha inquietud entre los padres.
El libro que causó la polémica es distribuido gratuitamente a todos los colegios de la provincia de Buenos Aires junto con muchos otros en el marco del programa “Identidades bonaerenses”, cuyo catálogo de títulos puede consultarse en la web.
La novela en cuestión es “Cometierra”, de la escritora Dolores Reyes. Y contiene párrafos como el que sigue: “Con la mano libre, se desabrochó el cinturón, bajó el cierre del pantalón y se lo quitó. La otra mano se cerró en mi nuca. No me podía mover. Tiró de mí. Sacó su p… por encima del bóxer y me la acercó a la boca. Me dejé llevar a un beso tan suave como si lo que besaba fuese una lengua. Le bajé el bóxer del todo. La piel que tocaba me gustaba. Podía apretarla con los labios mientras la p… jugaba en mi boca y se iba hundiendo. Ezequiel me miró chupar y yo también lo miré a él. Me agarró la cabeza con las dos manos. Mantuvo un rato la presión, hasta que en un movimiento sacó su p… de mi boca y sus manos buscaron mi cadera. Me llevó hacia él.”
También en una escuela de la provincia de Neuquén había habido polémica por el uso de este libro y algo similar ocurrió en Necochea.
“Dar información que no es acorde con la edad también es una forma de corrupción de menores -dijo el psicólogo clínico Ezequiel Baigorria a Infobae-. Los chicos no están preparados para recibir información de sexo adulto. Se naturalizan y se asimilan cosas que no tienen por qué ser naturales para ellos en esas edades. Por ese lado es grave y es lógico que los padres se enojen”.
Y, en referencia al hecho de que se pretenda leer estos libros en el aula y forzar conversaciones grupales sobre el tema, agregó: “Es un atentado al pudor y uno puede preguntarse ¿por qué les interesa tanto hablar de eso con los chicos? No es una demanda de los menores sino un interés de adultos”.
Los libros con contenido de sexo explícito que recomienda la provincia están sugeridos a partir del ciclo orientado, es decir 3°,4° y 5°, o sea niños desde los 14 ó 15.
Todo esto se presenta siempre bajo un objetivo loable. Por caso, en el relato de las autoridades bonaerenses la finalidad de la ESI es prevenir los abusos. Los libros recomendados también crearían conciencia sobre la violencia de género.