Debido a las condiciones climáticas, el presidente Javier Milei decidió suspender la vigilia que iba a encabezar esta noche en Tucumán junto a un grupo reducido de gobernadores para celebrar un nuevo aniversario de la independencia argentina.
Según publica Infobae, como consecuencia de la niebla, que ya motivó la suspensión de varios vuelos comerciales, se complicó la operatoria para el viaje del mandatario nacional.
El principal problema no estuvo tanto en la partida del jefe de Estado, que estaba prevista para cerca de las 21:00, sino en el regreso a Buenos Aires, que había sido planeado para la madrugada.“El viaje que iba a realizar el Presidente de la Nación junto a su gabinete y demás funcionarios del gobierno a Tucumán en el día de hoy queda suspendido. La razón de la decisión radica en los informes recibidos por Casa Militar y la Fuerza Aérea Argentina que refieren a la situación climática que impide realizar los vuelos pertinentes”, escribió en su cuenta de X el vocero, Manuel Adorni.
Cerca de las 17:30, la cúpula de la Casa Rosada le confirmó a ese personal que no iban a partir, por lo que se canceló el operativo de avanzada y, por lo tanto, también el encuentro patrio.
Si bien era un acto protocolar, este iba a ser el primer encuentro entre el líder libertario y los representantes de las provincias, que vienen reclamándole a la Nación mayores fondos para compensar la caída de la recaudación.
De todas formas, eran pocos los gobernadores que habían confirmado su asistencia: además del anfitrión, Osvaldo Jaldo, iban a viajar el misionero Hugo Passalacqua, el salteño Gustavo Sáenz y el catamarqueño Raúl Jalil, mientras que Córdoba y Entre Ríos estaban por enviar a sus vices, Myrian Prunotto y Alicia Aluani, respectivamente.
Esta es una diferencia importante respecto del evento del año pasado, cuando fueron los líderes de 18 de los 24 distritos del país, aunque las autoridades nacionales no toman estos ausentismos como una muestra de disconformidad por parte de las provincias.
