La actriz Anna Kendrick dijo que su participación en la saga «Crepúsculo» la «traumatizó» y, lejos de referirse a sus compañeros o al equipo de producción, hizo hincapié en el gélido clima de Portland, ciudad donde se rodó el filme.
«Me sentía en plan que sabía que estaba en un grupo grande de personas y que seguro acabaríamos siendo todos amigos después, pero en ese momento solo tenía ganas de matarlos», dijo sobre los primeros días de filmación.
«La filmamos en Portland y sentí que era una ciudad muy fría y miserable. Recuerdo que solo llevaba mis Converse (zapatillas de lona) y estaban completamente empapadas», explicó la actriz en una entrevista para Vanity Fair, citada por la agencia de noticias española Europa Press.
Kendrick, nominada al Oscar por «Amor sin escalas», estuvo en todas las entregas de la saga vampírica en el papel de Jessica, la mejor amiga de Bella en el el colegio.
«Hubo un lazo de unión, como si hubiésemos vivido un suceso traumático. Como cuando te imaginas a personas que han sobrevivido a una situación similar a la de los rehenes, uno de esos vínculos que marcan el resto de tu vida», afirmó.