El contador Jorge Gil se refirió al reperfilamiento de la deuda de la provincia y brindó su postura al respecto. “Pareciera ser que esto implica no pagar, y en realidad es exactamente lo contrario”, sostuvo.
El ex rector de la UNPSJB habló sobre la reestructuración de la deuda de la provincia, uno de los temas más debatidos actualmente en el arco político de Chubut. Al respecto, dijo a FM La Petrolera que “la renegociación con un acreedor, cualquiera sea, crea un ambiente optimista. El optimismo se basa en una expectativa favorable respecto del futuro. La posibilidad de no pagar y diferir el pago se entiende como una posibilidad de acumulación de capital, algo que genera una renta y luego permite pagar la deuda. Ese es un poco el análisis que se usa en el análisis financiero de las políticas económicas”, señaló el contador Jorge Gil.
En este sentido, el ex rector de la Universidad Nacional de la Patagonia San Juan Bosco remarcó que, en el caso puntual de Chubut, la deuda tiene una particularidad: “los bonistas que tienen bonos de Chubut tienen una garantía real de flujo, así se llama. Esto es: usted captura parte de una renta futura, de una renta productiva de la provincia, que en este caso es la explotación del hidrocarburo. Esta renta es capturada antes de que el propio dueño del recurso pueda tenerlo. El inversor de bonos de Chubut no tiene riesgo, excepto que la producción de la provincia caiga de manera sideral y abrupta”.
Por último, Gil sugirió que una posibilidad firme para Chubut para renegociar su deuda sería que el gobierno nacional permita participar de una operatoria en donde Chubut pueda recaudar fondos para cancelar anticipadamente los bonos. “Yo creo que va a ser difícil. Voy a desconfiar de cualquier tipo de renegociación que implique sacrificar garantías por parte de los bonistas. Pareciera ser que esto implica no pagar, y en realidad es exactamente lo contrario”, concluyó.
