Los precios del petróleo cayó el día de ayer más de 3% como consecuencia del incremento en el número de casos del rebrote de coronavirus en EEUU y por el temor de los inversores a que vuelvan a regir medidas de confinamiento que puedan afectar el consumo de combustibles.
El aumento de casos por el rebrote de Covid-19 provocó que estados como California y Texas vuelvan a imponer nuevas restricciones a la circulación y a los comercios.
Se estima que los bloqueos y confinamientos renovados afecten cualquier recuperación sostenida en la demanda de combustible. Los datos de la Administración de Información de Energía de EEUU mostraron que las existencias de combustibles cayeron 4,8 millones de barriles la semana pasada, mucho más de lo que esperaban los analistas.
En el centro de almacenamiento de Oklahoma, desde donde se despacha el crudo para las refinerías, los stock de petróleo aumentaron alrededor de 2 millones de barriles en la semana.
En India, un importador neto de petróleo y de productos refinados, la demanda de combustible cayó un 7,9 por ciento en junio en comparación con el mismo mes del año pasado.
Con todo este contexto, los precios de los futuros se mantuvieron en alrededor de 40 dólares por barril y algunos analistas esperan que se sostengan en torno de ese valor a la espera de la reunión que mantendrán los países nucleados en la OPEP+ el próximo miércoles, para definir si se prolongan los recortes a la producción.
Mientras tanto, el mercado se mueve entre los excedentes de producción, las existencias almacenadas en los buque tanques, la parálisis de los yacimientos de crudo no convencional y las restricciones de algunos productores como Libia.
En tanto, se produjo una toma de ganancias en el mercado del oro donde el metal cerró en 1.808 dólares la onza troy con una retracción del 0,7%.