Pablo Laurta, autor del doble femicidio de Luna Giardina y Mariel Zamudio, hizo su primera declaración este miércoles, al ser trasladado desde la ciudad de Gualeguaychú hasta Concordia, en la provincia de Entre Ríos, donde será imputado por el homicidio de Martín Palacio, el chofer que contrató para viajar de esa ciudad a, presuntamente, Santa Fe. Sin embargo, se dirigió a Córdoba, donde habría asesinado a tiros a su expareja y su exsuegra.
“Todo fue por justicia”, dijo a Canal 9 Litoral. La declaración se produjo antes de que efectivos cerraran la puerta del vehículo que lo trasladaría a la fiscalía. El pasado lunes, la Policía entrerriana encontró un cuerpo, decapitado y sin brazos dentro de una bolsa. Creen que se trata del remisero.
Lejos de mostrar arrepentimiento, el femicida observó de costado a la periodista del medio local presente en el lugar, y reivindicó los atroces crímenes que cometió.
Al llegar a la fiscalía, Laurta lanzó otra frase a los medios: “Tienen que venerarlo, es un mártir”, dijo. Aunque sus palabras se perdieron entre los gritos de los cronistas, el micrófono de A24 pudo captarlo.






















