Lo hizo de nuevo. Gildo Insfrán, a los 72 años, ratificó su poder electoral en esta provincia del noreste argentino.
El peronista seguirá siendo el gobernador de Formosa, hasta 2027. Consiguió su octaba reelección desde que en 1995 ejerció su primer período por un margen amplísimo, obteniendo casi el 70 por ciento de los votos. Totalizará, entonces, 32 años en el poder, un record nacional díficil de igualar.
La oposición, sin una fórmula de unidad, poco pudo hacer para evitar un nuevo triunfo del oficialismo que desde el retorno de la democracia domina en cada elección.
“Seguiré hasta que el pueblo diga. Soy militante de una causa y me debo al pueblo”, había expresado Insfrán al votar en su localidad natal, Laguna Blanca, a 140 kilómetros de la capital provincial, en la Escuela de frontera número 6, José Hernández, donde también cursó sus estudios primarios. Votó después de las 10 de la mañana, rodeado de vecinos y de familiares que lo conocen desde hace muchos años. Causó mucho revuelo su presencia, a tal punto que se demoró su ingreso más de 20 minutos al establecimiento educativo de tantos saludos, abrazos, besos y fotos que repartió entre hombres, mujeres y niños.
Para Juntos por el Cambio la derrota por casi 50 puntos significa un golpe mayúsculo. En los 9 departamentos (Formosa Capital, Laishí, Pilcomayo, Pirané, Pilagás, Patiño, Bermejo, Matacos y Ramón Lista) no ganaron ninguna intendencia y solamente pudieron sumar 4 concejales.
Fuente: Infobae