El último terremoto, que se registró con una magnitud de 8,0, llevó a los funcionarios a emitir un aviso de tsunami en partes del Pacífico, incluido Hawái. Horas antes, ocurrieron dos terremotos con magnitud superior a 7: uno cerca de la región de las islas Kermadec en Nueva Zelanda y otro cerca de Gisborne.
Se emitió un alerta para las costas de Nueva Zelanda, Polinesia Francesa, Australia, Islas Salomón, Hawái, Chile, Perú, Países de centro América y México (costas del Pacífico). Las olas podrían tener un incremento desde 30 cm a un metro de altura.
