Un guardavidas de la playa La Barra protagonizó un heroico rescate este viernes, salvando a un niño de tres años de una peligrosa corriente de retorno. Sin embargo, minutos después, el socorrista fue agredido físicamente por el padre del menor.
El incidente comenzó cuando el guardavidas advirtió al niño ingresando a una zona prohibida por su peligrosidad. A pesar de la advertencia a la madre, quien hizo caso omiso, el niño quedó desatendido y fue arrastrado por la corriente. El rápido accionar del guardavidas evitó una tragedia, rescatando al pequeño sano y salvo.
Tras el rescate, una discusión se desató entre el guardavidas y el padre del niño. El hombre, según el relato del socorrista, le reprochó su intervención, argumentando que para eso le pagaban. La discusión escaló hasta que el padre golpeó al guardavidas en la cara. Otros bañistas intervinieron para separar a ambos, requiriendo incluso la presencia de la Prefectura debido a la persistencia de la actitud agresiva del padre.
Carlos Curbelo, coordinador del equipo de guardavidas de la Intendencia de Maldonado, confirmó la denuncia realizada el sábado. «Lo sacó de abajo del agua. Le salvó la vida al chiquilín», afirmó Curbelo, enfatizando que «somos guardavidas, no guardería».
La Intendencia de Maldonado repudió enérgicamente el incidente, calificándolo como una agresión «patoteril». Señalaron que los padres son responsables de la seguridad de sus hijos en la playa, y que los guardavidas intervienen solo en situaciones de peligro inminente.
