Científicos crearon una nueva «superenzima» que puede descomponer el plástico hasta seis veces más rápido que la enzima anterior en la que habían trabajado.
Un equipo de investigadores que previamente había rediseñado una enzima que come plástico llamada PETase ahora la ha combinado con una segunda enzima para acelerar el proceso, según un comunicado de prensa de la Universidad de Portsmouth.
La superenzima podría tener implicaciones importantes para el reciclaje de tereftalato de polietileno (PET). Este es el termoplástico más común utilizado en botellas de bebidas de un solo uso, alfombras y ropa.
El PET tarda cientos de años en degradarse en el medio ambiente. La enzima PETase puede descomponerlo en sus elementos básicos en unos pocos días.
John McGeehan, coautor principal y director del Centro de Innovación de Enzimas de la Universidad de Portsmouth, le dijo a CNN que este último desarrollo representa un gran paso hacia el uso de enzimas para reciclar el plástico y reducir la contaminación por este material.
«En realidad nos sorprendió bastante que funcionara tan bien», dijo McGeehan. De todas maneras, subrayó que el proceso «todavía es demasiado lento» para ser viable desde el punto de vista comercial.
McGeehan le dijo a CNN que los investigadores han recibido fondos para llevar a cabo más experimentos. Además explicó que desarrollos exitosos en el área podrían significar que el PET existente podría reciclarse en lugar de usar combustibles fósiles para crear plástico nuevo.
«Estamos viendo (posibles) enormes ahorros de energía», dijo McGeehan.
¿Como funciona?
La superenzima combina la PETasa y la MHETase. Una mezcla de los dos descompone el PET dos veces más rápido que la PETasa por sí sola, mientras que la conexión de las dos enzimas aumenta la velocidad tres veces más.
McGeehan usó Diamond Light Source, un dispositivo que usa rayos X 10.000 millones de veces más brillantes que el Sol para poder ver átomos individuales, para mapear la estructura molecular de MHETase.
Los investigadores pudieron entonces diseñar la nueva superenzima conectando MHETasa y PETase. Lo que hicieron fue unir efectivamente el ADN de las enzimas para crear una cadena larga, dijo McGeehan a CNN.
La técnica se usa comúnmente en la industria de los biocombustibles, que usa enzimas para descomponer las celulasas. No obstante, McGeehan dijo que esta es la primera vez que tiene conocimiento de que se combinen las enzimas para descomponer el plástico.
El estudio completo se publicó el lunes en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences.
























