La ex presidenta de la Nación, Cristina Kirchner, se ha manifestado en relación al escándalo tras una denuncia por violencia de género que involucra al ex presidente Alberto Fernández y su esposa Fabiola Yáñez. En un mensaje publicado en su cuenta de X, Cristina Kirchner destacó que la misoginia, el machismo y la hipocresía no tienen bandera partidaria.
En su comunicado, Kirchner señaló que si bien Fernández no fue un buen presidente, tampoco lo fueron Mauricio Macri o Fernando De La Rúa. Sin embargo, hizo hincapié en las imágenes difundidas por los medios de comunicación que muestran a Fabiola Yáñez con hematomas en su cuerpo y rostro, junto a los chats que revelan el diálogo entre ella y el ex presidente.
La ex mandataria expresó que estas pruebas revelan aspectos oscuros de la condición humana y subrayan la situación de la mujer en cualquier tipo de relación, ya sea en un palacio o en una choza. Cristina Kirchner enfatizó que la violencia verbal o física contra la mujer no tiene bandera partidaria y afecta a toda la sociedad.
En un acto de solidaridad con las mujeres víctimas de violencia, Kirchner recordó las palabras del papa Francisco sobre la relación entre la violencia física y verbal.
El comunicado de CFK
Alberto Fernández no fue un buen presidente. Tampoco lo fueron Mauricio Macri o Fernando De La Rúa, sólo por mencionar a los que desempeñaron su mandato en lo que va del siglo XXI. Seguramente la lista sería más larga si extendiéramos la cronología. Pero las imágenes que vimos ayer por la noche transmitidas por los medios de comunicación en virtual cadena nacional, en lo que constituye una verdadera revictimización de la denunciante, SON OTRA COSA.
Las fotos de la Sra. Fabiola Yañez con hematomas en su cuerpo y rostro junto a los chats publicados que revelan el diálogo entre ella y el ex Presidente, no sólo muestran la golpiza recibida, sino que delatan los aspectos más sórdidos y oscuros de la condición humana. Permiten comprobar, una vez más y dramáticamente, la situación de la mujer en cualquier relación, se desarrolle ésta en un palacio o en una choza.
La misoginia, el machismo y la hipocresía, pilares en los que se asienta la violencia verbal o física contra la mujer, no tienen bandera partidaria y atraviesan a la sociedad en todos sus estamentos.
En lo personal y como mujer que ha sido objeto (y lo sigue siendo) de las peores violencias verbales y políticas, hasta la máxima experiencia de violencia física, como fue el intento de asesinato del 1 de septiembre del 2022, expreso mi solidaridad con todas las mujeres víctimas de cualquier tipo de violencia, sin olvidar las palabras que Francisco me dijo al día siguiente de aquel hecho: “toda violencia física siempre es precedida de violencia verbal”.