La Comisaría de Corcovado se convirtió en escenario de una brutal agresión entre dos efectivos policiales. Un sargento de 43 años enfrenta ahora un juicio por lesiones leves y amenazas simples tras golpear a un compañero de trabajo.
El incidente, que ocurrió el 2 de enero, tuvo como detonante un simple saludo. Según el relato del sargento, su compañero no lo saludó de manera adecuada, lo que desató su furia.
El golpe, propinado en el rostro, dejó al compañero con una lastimadura en el labio inferior derecho. La situación se agravó cuando el sargento, aún visiblemente alterado, amenazó al efectivo herido y lo desafió a una pelea.
El caso llegó a la Justicia, que decidió formalizar la investigación preparatoria de juicio. El sargento, que se desempeñaba como Sargento Primero, se enfrenta ahora a la posibilidad de ser condenado por sus acciones violentas.
