Una situación generó preocupación el pasado lunes por la tarde en el Parque Puerto Bonito, en Epuyén, luego de que un vecino que realizaba buceo libre encontrara una granada de mano sumergida a unos 30 metros de la orilla.
El hallazgo se registró alrededor de las 18:25 horas, cuando el ciudadano advirtió el objeto en el fondo del lago, lo señalizó con una lata y dio aviso inmediato al personal policial, que desalojó el parque y notificó a las autoridades competentes.
Minutos después arribó al lugar personal de la División Explosivos Sección Esquel, junto al jefe de la Comisaría Distrito Epuyén, quienes ingresaron al agua y confirmaron la presencia del artefacto.
Tras una cuidadosa inmersión, constataron que la granada —modelo FMK2, de color verde— mantenía sus anillas de seguridad y transporte, aunque presentaba signos leves de oxidación y carecía del mecanismo detonador.
Los efectivos aseguraron el elemento con cinta de seguridad y lo trasladaron de manera preventiva hacia la ciudad de Esquel, donde quedó bajo custodia del personal especializado para su posterior disposición final.
El procedimiento se realizó sin incidentes y bajo estricto protocolo de seguridad, garantizando la protección de las personas que se encontraban en el lugar.
Otro caso similar
El pasado viernes 28 de noviembre por la mañana también en el Lago Epuyén, dos hermanos que practicaban buceo libre encontraran un artefacto similar a una granada y lo dejaran sobre unas piedras en la orilla del Parque Puerto Bonito.
El hecho ocurrió alrededor de las 9:30 horas, cuando la División Explosivos de Esquel fue alertada por la 2ª jefa de la Unidad Regional. Personal de la Comisaría local intervino primero, desalojando preventivamente el parque y estableciendo una consigna policial mientras se aguardaba la llegada de los especialistas.
Una vez en el lugar, el equipo de Explosivos aplicó el protocolo correspondiente: aseguraron un perímetro de seguridad y avanzaron hacia el artefacto, constatando que se trataba de una granada de mano modelo FMK2, de color verde y con un avanzado grado de oxidación en su cuerpo y en su sistema de iniciación. Según se detalló, la pieza no tenía el seguro de transporte colocado, aunque sí conservaba el seguro de palanca, ambos afectados por el óxido.
El personal técnico procedió a asegurar el sistema de iniciación y pesó la granada, que registró 319 gramos. Luego destruyeron su mecanismo de disparo y trasladaron el artefacto hacia Esquel para su resguardo y posterior disposición final.
























