La política de dólar barato impulsada por el Gobierno impactó negativamente en el turismo receptivo durante abril, registrando una caída del 4,8% respecto al mismo mes del año anterior, según datos del INDEC. En contraposición, el turismo emisivo experimentó un aumento del 24%.
En abril ingresaron 699.300 visitantes no residentes (418.800 turistas y 280.500 excursionistas), una baja interanual del 8,3%. Los principales mercados emisores fueron Uruguay (18,7%), Brasil (18,5%) y Europa (15%). El 45,2% de los turistas ingresó por vía aérea, 42,9% por vía terrestre y el 12% restante por vía fluvial/marítima.
Por otro lado, 1.425.600 residentes salieron del país (881.200 turistas y 544.400 excursionistas), un 24% más que en abril de 2024. El 77% viajó a países limítrofes, principalmente Brasil (26,8%), Chile (24,6%) y Paraguay (11,5%). El 51% utilizó vía terrestre, 41,6% aérea y 7,5% fluvial/marítima.
El saldo fue negativo en abril, con 726.300 visitantes internacionales menos debido a la mayor salida de argentinos al exterior. Esta situación refleja el impacto de la política cambiaria en el sector turístico, favoreciendo la salida de argentinos y desalentando la llegada de turistas extranjeros.
