Un conmovedor rescate animal tuvo lugar este domingo en las afueras de Gaiman, donde una pareja descubrió a un perro enterrado vivo y en grave peligro. Al escuchar sus débiles ladridos, la pareja comenzó a excavar para liberarlo, mientras simultáneamente alertaba a la policía sobre el caso de maltrato animal.
Agentes policiales, arribando al lugar minutos después, finalizaron la excavación y rescataron al can, al que limpiaron y le proporcionaron agua. La agente Cyntia Debastiani, quien participó en el rescate, describió la escena: “Apenas lo vi, me destrozó el corazón y decidí en ese momento llevármelo”. Tras obtener el consentimiento de sus padres, Debastiani adoptó al perro, al que nombró Toni, integrándolo a su familia con otros tres perros.
El perro, encontrado enterrado a la vera de la Ruta 7, camino a Trelew, detrás del barrio 24 Viviendas, fue hallado con sus ojos severamente irritados por la tierra.
Según el veterinario, Toni tiene aproximadamente ocho años. Si bien permanece en observación por la irritación ocular, su estado de salud es bueno.
“Me dijo el veterinario que tiene aproximadamente ocho años. Ojalá esto no vuelva a pasar, es despiadado y cruel pensar que alguien puede ocasionarle un daño semejante a un animal indefenso, con intención de matarlo, porque Toni no podía salir solo de ahí”, comentó Debastiani, visiblemente afectada por el incidente.
En menos de 24 horas, Toni pasó del horror de estar enterrado vivo a la calidez de un nuevo hogar, rodeado del amor de una familia que le brindará cuidados y compañía durante sus últimos años de vida. La policía investiga el caso para determinar la responsabilidad de quienes perpetraron este acto de crueldad animal.
Con información de Jornada
